Sin apenas darte cuenta, contemplaste la escena que tenía lugar ante ti, y pudiste comprobar que aquel día no serías el protagonista y que nadie iba a acariciarte el pelo, ni te haría ninguna carantoña, ni pondría tus muchas cualidades como muestra de la sabia elección de tus amos. Con tu dueña ya amortajada, tus ojillos lo interrogaban todo sin…
Paciencia, Fermín, paciencia. Piensa que la vida es una sucesión de trágalas y que a ella se viene a sufrir y a sufrir, que no en vano le llaman el valle de lágrimas. No debes tomarlo todo por la tremenda. Piensa que las cosas a veces se juntan de una manera que nadie controla, y que por algo se dice…
Sé que nadie me querrá como tú, porque cada día, cuando paso, tu mirada siempre muestra la expresión entre dulce y adusta que tanto me gusta, y que me hace imaginarte en la intimidad, donde poder acariciar esa desnudez que ahora me enseñas de improviso, pérfidamente, tras haber llevado esta semana un vestido sin escote alguno. Sé que te inclinas…
Cuando acabó el libro, la invadió una dulce languidez. Como le sucedía siempre, no podía dejar de pensar en la heroína de la novela, en las muchas y terribles vicisitudes por que el autor le había hecho pasar. Comparaba todo ello con su vida muelle, aburrida, desocupada, de esposa de un hombre sin atributos que lo acreditaran como tal. Sin…