No se puede negar que ésta es una escena apacible. Todo en ella mueve a la quietud, a la paz, a la relajación: el mar en calma, la luz cálida del atardecer que se aproxima, la actitud tranquila y sosegada de este matrimonio; hasta el barquito del fondo equilibra las masas de la imagen. Todo en ella respira silencio y…