La frase (es un eslogan publicitario) es muy simple. Es muy conocida. Nos la han repetido muchas veces, con ésa o con otras palabras muy similares. Nos la sabemos. Conocemos la verdad -siempre relativa- de su afirmación. Con todo, hemos de confesar que la aplicamos poco. O bien no podemos hacerlo, o bien no sabemos, o bien nos encanta ser…