PALABRERÍO CANALLA (55)

FÁBULA: Cuentecillo que usa y abusa de la prosopopeya con el taimado objetivo de inyectar una dosis equis de recomendaciones sesudas y racionales sobre cómo conducirse en esta atribulada y terrible vida.
FACULTAD: 1. Capacidad, potencia de llegar al acto. 2. Edificio de estética horrorosa que alberga un número variable de profesores, aulas, matriculados, alumnos, libros y máquinas tragaperras, y que se usa para pasar allí una serie de años que se emplean en pensar qué hacer con la vida propia mientras se van acumulando experiencias que sirvan para algo cuando se salga de dichas circunstancias.
FACUNDIA: Verborragia (v.) matizada por cierto sentido de la situación, pero con facilidad para mangarla parda a poquito que el usuario se descuide.
FALANGES: 1. Huesecillos de la mano que, a pesar de su aparente fragilidad permiten hacer maravillas si se emplean bien. 2. Cuerpos de ejército helenos muy compactos, entusiastas y rígidos que resultaron un éxito completo durante unos siglos, hasta que las legiones (menos densas, más jerárquicas y flexibles) les pegaron unos repasos tremebundos, de los que ya no se recuperaron. 3. [singular] Partido totalitario español de carácter fascista, pero con algún toque humanitario-altruista que lo hacía muy particular. Tuvo cierto auge mientras fue el único tolerado desde el gobierno franquista; cuando se legalizaron otros partidos, con la democracia, no se quedaron ni los fundadores (en parte porque habían muerto).
FALSEDAD: Esencia de lo habitual, de lo cotidiano, y cuya apariencia, siempre presente, ya no nos plantea preocupación en primera instancia.
FAMA: Opinión que los demás tienen sobre alguien; todos aspiran a tenerla buena, pero en el camino hay un 98 % de probabilidades de adquirir la mala o —lo cual importuna más a quien a estas cosas aspira—, la volátil, nómada, viajera, mudable.
FAMILIA: Agrupación biológica de seres emparentados por sangre; su obligatoria pertenencia a la misma ocasiona que sea la causante de lo mejor y de lo peor que le puede ocurrir a alguien, dependiendo y pendiendo de.
FANATISMO: Monolítico procedimiento que pretende aproximarse al raciocinio, que se suele presentar cuando el neocórtex cerebral presenta una delgadez extrema, y además concurren otras circunstancias socioeconómicas concretas que ejercen de emulgente de la escasa masa cerebral antes citada.
FANTASMAS: Entelequias inexistentes que llegan a existir ante la tremenda insistencia de algunos humanos que se obstinan en no convencerse de que lo que hay es lo que hay y que no hay más cera que la que arde.
FANTASÍA: Grado supremo de la imaginación, en cuanto capacidad que posee tiene el cerebro de representar las cosas ideales en forma sensible o de idealizar las reales, todo ello con el noble propósito de negar la realidad y de intentar mejorarla, aunque sea vía audiovisual interna y temporal. Gracias a ella, no obstante sus limitaciones, se han podido crear magnas drogas literarias o artísticas de imperecedero recuerdo.

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