Hace unos cuantos años, cuando era aún más racional y estricto de lo que he venido a ser, yo comenzaba un libro y seguía leyéndolo hasta que lo terminaba, aun en los casos en que aquello se me indigestara, se me hiciera un muro infranqueable, no entendiera nada o simplemente me aburriera como un oso aburrido. Así sufrí muchas obras…
Las tonterías de la red me dejan indiferente la mayoría de las veces. Eso, si no me enfadan y obligan a cambiar de registro para no amargarme el día. Pero, en ocasiones, las tonterías de la red son algo simpático y susceptible suscitar alguna reacción inteligente. El otro día vi circular por las cuentas de alguna gente conocida esta imagen…
Mientras revisaba carpetas para colocar una foto que pudiera ser incluida un primero de año, recalé en este señor que, muy de mañana, leía enfrente de su puesto de artesanía, al brillo rasante de un sol estival. Lo hacía con mucha pausa, y apenas sin moverse. En el rato que estuve mirándolo, no levantó la mirada para ver si alguien…
Como tengo pocos vicios, confieso que en ellos suelo gastar algo más de lo que la media o la prudencia aconsejaría. Así, en fotografía, informática, telefonía y biblioteca no suelo escatimar demasiado, pues me gusta disponer de aparatos que proporcionen calidad y, sobre todo, no resten tiempo (en averías, obsolescencias, garantías, mandangas…). Pero es que este año, a mayores, el…
Alguna vez me lo han preguntado. Y aunque lo digo tantas veces, siempre hay quien se siente sorprendido de que en pleno siglo XXI yo hable de que “me falta algo el día que, por lo que sea, no puedo leer”. Con ello, no me refiero al acto físico de leer. Por mi profesión, yo tengo que leer todos los…
Este claustro no es de los más bellos que albergo en la memoria. Pero cuando volví a ver la foto, me trajo recuerdos de otros que sí lo son y donde también, como en este caso, leí algunas líneas de algunos poetas de silencios silábicos y estremecidas pausas con que aliñar la soledad y la meditación. Ahora, así, con rapidez,…
Leo un libro sobre la lectura. He ahí uno de mis aspectos más idiosincrásicos. Leer sobre libros. Ya hasta José, el hijo de Mauro y Margarita, mis libreros, me tienen calao, y me enseñan las novedades sobre la masturbación más productiva que conozco. El otro día me muestra un libro de un tal Alberto Manguel, argentino-canadiense, titulado Una historia de…