GAS: Fluido de notoria utilidad en asuntos que tengan algún punto de conexión con la muerte, bien sea a través del suicidio, bien por su empleo para solucionar problemas de ejecución a gran escala, o bien para la cocina (pues, al fin y al cabo, lo que se da a cocer o freír son seres muertos).
GENEROSIDAD: Egoísmo maquillado cuyos intereses se cobran con menos premura y dejando mucho más tiempo de margen que el que suele ser habitual.
GÉNESIS: Hermosísimo libro mitológico colocado al principio de la Biblia con el fin de hacer de gancho para leerse todo el voluminoso (y por partes, tediosísimo) conjunto de libros.
GENIO: Aberración natural que afecta a la inteligencia, a la sensibilidad, a la creación, al sacrificio, exacerbándolos; y a la egolatría, a la soberbia, al elitismo, a la prepotencia, exacerbándolos en igual medida, en buena lógica.
GENTE: Como la propia palabra indica no es más que eso: gente.
GENUFLEXIÓN: Gesto de inclinación de rodilla y cabeza ante lo que se considera digno de ser adorado; es una prueba fehaciente del carácter servil y humillante de las religiones cristianas, empleado también por muchos débiles en general.
GEOFAGIA: Hábito de ingerir tierra como sustitutivo de otros alimentos más nutritivos, pero menos naturales y menos excéntricos, con lo cual no podríamos tener esa razón que ya nos lograse dos páginas enteras en algún suplemento hebdomadario, o bien un mini-reportaje de unos minutos en algún programa televisivo de esos que sacan rarezas y consiguen mucho share.
GEOPOLÍTICA: Ciencia mediante la cual los países intentan explotar a los demás estudiando mapas, situaciones geográficas y tendencias políticas, a la par que dotando a su ejército de la fuerza necesaria para llevar a cabo la tarea de dominio estratégico que se les encomiende. Vamos, lo que se hace en las guerras, pero más de despachos y mapas, se entiende
GIGANTE: Enormemente grande, desproporcionado; el problema es con respecto a qué, porque todo depende, del color con que se mire, todo depende, depende. Porque para el gusano, un cerdo simula una montaña respetable y hasta digna de adoración o temor.
GIGANTISMO: Manía que aqueja a muchos niños después de ver una cabalgata, y que consiste en desear que sus papás se conviertan en gigantes, de los que poder fardar y con los que poder defenderse mejor. Afecta sobre todo a los niños que notan que sus padres son, cómo decirlo, poco padres.

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