John Banville es famoso por ser un novelista irlandés de largo alcance (obtuvo el premio Booker en 2005, y el premio Princesa de Asturias de las Letras en 2014, entre otros), que cuando escribe novela negra lo hace bajo el pseudónimo de Benjamin Black. Todo el mundo que recala en este género tan en alza hoy día, lo sabe. Sin embargo, él tiene ciertas dudas de que el mérito de su persona se diluya ante el éxito de las obras creadas con ese nombre distinto al suyo, sobre todo porque las ventas son muy superiores a las que firma con su verdadera identidad. Tanto es así, que en una entrevista de Rodrigo Fresán  para ABCD las Artes y las Letras (nº 893, marzo de 2009), el escritor la concluye con la siguiente frase:

«En mis pesadillas veo un diccionario de escritores editado en 2080 donde en la entrada John Banville se lee: “Banville, John”: ver “Black, Benjamin”»

Reto a quien esto pueda leer a que me aclare si se trata de un temor real, si es una boutade ingeniosa propia del hartazgo de que le pregunten siempre por lo mismo, o qué. De momento, yo me decanto por la segunda, sin perder de vista la primera. Vamos, que sigo sin tenerlo claro.