Cuando amenazaste con que me dejarías, no te creí. Aun así, me dejé inundar por un completo abatimiento. Pero acerté. Mi intuición nunca me falla. Porque jamás te fuiste. Maldita.
La cerillera se moría de frío en la noche invernal. No había vendido nada, por lo que estaba de muy mal humor. Un niño, que pasaba con su padre de la mano, le arrojó en la faltriquera un soldadito de plomo viejo con el que iba jugando. Lo miró y lo palpó con los deditos que asomaban por los mitones.…
Aquella noche, el mar embistió con crueldad lanzando contra la roca oleajes, arenas, maderos. Duramente golpeada por el temporal, dejó caer algún fragmento, pero con paciencia lo soportó todo. Como siempre, continuó creyendo que era bueno, manso y fiel, pero que algunas noches se volvía loco, y se rebelaba contra ella, agrediéndola hasta en lo más íntimo. Nunca ha podido…
Fue un mal salto. Ahora lo sabes bien. En este instante, cuando los espasmos de dolor te acometen por todo el cuerpo, lo sabes bien. Te mareas de tanta sangre como pierdes, pero te das cuenta de que sí: fue un mal salto. No obstante, sabes de sobra que no fue tuya la culpa, que te pasaste un buen rato…
Pasado el año fotográfico en exclusiva, después del inicial en que se compartía imágenes y escritos, es muy probable que el ritmo perfecto para mis expectativas sea éste que el nuevo año inaugura. Fotos, a lo largo de seis días de la semana, alternando retratos con mis fotos habituales. Y el domingo, a modo de descanso visual, un pequeño cuento,…
Es bien triste que me pase siempre. No sé qué ven en mí, que se quedan de inmediato rígidos, inmóviles, petrificados. Se morirán de amor o de admiración, no sé, o… simplemente los mato de alguna forma. Algo que me irrita en lo más hondo, pues no hallo más compañía que mi alargada sombra. ¿Qué verán en mí? ¡Lo que…
Bien, un año después de iniciada la nueva andadura de este blog, y echando la mirada atrás, puedo decir que los objetivos que me marqué para esta nueva etapa han sido cumplidos por completo. Me había propuesto colgar una foto diaria (exclusivamente, sin textos), y así ha sido. Bien es verdad que muchas veces hice trampa, y que no era…
Tras un parón demasiado prolongado, regresan a este espacio las fotografías y las palabras. Las primeras, en la misma línea (tampoco uno ha cambiado tanto en seis meses) y, espero, en idéntica cadencia. Las segundas, mucho más concentradas, deberán dejar paso a la imagen irremisiblemente, puesto que el proyecto inicial era demasiado ambicioso, y se “comía” otras parcelas. Ahora sólo…
Bien, llegados a este punto, procede un receso, un parón, acaso un balance. Medio año de fotografías, de textos, a un ritmo casi diario (he fallado poquísimos días), producen bastante tensión y no poco cansancio, por no hablar del sentimiento de repetición que siempre me asalta ante todo cuanto abordo. Por otro lado, y al tiempo, albergo sentimientos algo contradictorios…

Vivir no es respirar, es obrar, hacer uso de nuestros órganos, de nuestros sentidos, de nuestras facultades, de todas las partes de nosotros mismos que dotan de sentido a nuestra vida. En otras palabras: VALORAR LA VIDA es una de las mejores formas de prolongarla. Se impone, por tanto, paladear las buenas cosas, los vinos milenarios y otras bebidas, según…