PACIENCIA: Aquí tampoco resisto la oportunidad de copiar del DRAE: “Tolerancia o consentimiento en mengua del honor”. Yo no lo habría dicho más enrevesadamente, ni queriendo, vamos, aunque lo intento con incansable asiduidad.
PACTO: Acuerdo que presupone dejación u olvido momentáneo de las hostilidades que lo han precedido, en aras de poder relajar estreses, reorientar energías en otros campos, evitar destrucciones inmediatas, obtener algún beneficio oculto o evidente, etc. Aunque parezca que un pacto se hace en plan de igualdad, nada es menos cierto, pues de los mismos salen beneficiados de diferente forma cada uno de los firmantes, aunque los dos afirmen lo contrario.
PADRES: Categoría socio-biológica que se suele adquirir tras coyunda (hoy no necesariamente) voluntaria (no obligatoriamente) de dos miembros de la misma especie y diferente sexo (hoy no necesariamente), y que requieren además el concurso de ciertas condiciones físicas, que hoy son manipulables, por lo que el efecto sorpresivo se ha ido perdiendo con los años, con la planificación familiar, con la técnica. Se trata de una categoría dulce, gravosa, frustrante siempre a la larga. Pero quienes lo son, siguen insistiendo en que compensa, así que no hay más que hablar.
PAGANOS: No son quienes pagan más sino quienes debe pagar los platos rotos de cualquier situación, vista ésta desde el punto de mira de la religión oficial, sobre todo las monoteístas. Al principio, eran tenidos como bestias negras, cuando su número aún era superior al de los adeptos a tales monoteísmos; cuando su número decreció, dejaron de constituir un peligro y los platos rotos los abonan sectarios surgidos dentro de las propias filas, o los representantes de otros fanatismos.
PAJA: 1. Masturbación grosera, apresurada y falta de refinamiento, propia de quienes no toman el sexo más que como función fisiológica, o de gente ignara a la que lo mismo le da ocho que ochenta, o de gente refinada con prisa por aliviar cierta tensión nerviosa acumulada en el bajo vientre. 2. Todo aquello que aparenta mucho, por su gran volumen, pero que a la hora de ser valorado resulta muy frustrante en calidad.
PALABRA: Amasijo de rasgos curvos y rectos y de longitud y belleza variables, que en adecuada combinación puede producir el milagro de la significación, siempre que quien la reciba se halle en posesión de la adecuada clave descodificadora.
PALABRERÍO: Catálogo más o menos extenso de arbitrariedades en forma sucesiva que toma las palabras como pretexto para exponer una idea global de lo que se piensa de casi todo, o de lo que se cree pensar.
PANFLETO: Conjunto de páginas que intenta decir algo o movilizar a alguien en determinada dirección, pero con un lenguaje carente por completo de la más mínima estética y abundoso en solecismos y anacolutos; es propio de periodistas, estudiantes y sindicalistas, lo cual explica lo anterior.
PÁNICO: Miedo irracional e incontrolable hacia alguna cosa o alguna persona, por no entender (o no poder hacerlo; o no querer, que casos también hay) que todo tiene solución menos la muerte y que sólo al miedo —al pánico— es a lo único a lo que se debe tener miedo.
PANTEÍSMO: Idea religiosa que no es capaz de asimilar la idea de un dios hacedor separado de todo lo creado, y que postula que todo lo que existe tiene la categoría divina o, lo que es lo mismo, que todo lo que existe es Dios, o participa de la esencia divina. Se trata de la única forma teísta natural, comprensible, lógica, junto con el animismo.

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