Ultimada la tarea, David enfunda la espada, aún fresca de la sangre del gigante. En el semblante, indiferencia. En el cuerpo, el temblor reciente del desigual combate. En la figura, el escorzo de la gesta que el artista consagra. La honda no aparece: es material de pastores. La espada es la que lo define ahora, culminada su misión, anticipando las…
Tras la prolongada estancia en el hospital de a bordo, todos disfrutan de la compañía en un almuerzo de camaradería que casi todos añoraban. Las bromas se unen a los recuerdos y los planes inmediatos a ciertos interrogantes carentes de gravedad. Todos se congratulan de que el estado de coma en que se encontraba el homenajeado, sea ya sólo cosa…
Sí, señor juez, ya confesé en su momento. Pero debe usted saber que ese libro me produjo un efecto de euforia como nada en la vida había logrado, ni siquiera conseguir tras acoso y derribo a la Micaela, la moza de mejor cuerpo de mi pueblo. Es que ese libro… lo decía todo con exactitud, no sobraba nada, es perfecto:…
No sé por qué me dejé embaucar. Que si Escocia era un destino ideal, que si su historia y misterios eran inigualables, que si la paz que allí se respira es un antídoto contra todo, que si yo quiero ir y si no vienes ahí te quedas. Todo, razones muy convincentes, como se ve. Al final, fuimos. Lo primero, alquilar…
El hijo le dice a la madre que aún no es tiempo, que no está preparado, que no puede mostrarse aún al mundo, que no lo ha hecho nunca, que están en una boda, que los protagonistas han de ser los desposados, que si la falta de previsión ante unos invitados tan bebedores ha llevado al desastre, no es culpa…
Como mucho, y como favor personal que le otorgo, puedo decirle que el Conde ha tenido muy mala suerte con las mujeres. Siempre le acarrearon muchos problemas, pese a necesitarlas tanto. Todas ellas, como le cuento, sin excepción. Desde la primera, Clara, que le produjo ronchas y sarpullidos, hasta la última, que casi acaba con él, pasando por Iluminada, que…
El hijo de Layo nunca pensó el parricidio; del mismo modo, jamás planeó el incesto con Yocasta. Pero primero arrebató la vida a su padre y acabó casándose con su madre. También terminó sus días ciego por propia mano, de resultas de su inconsciencia y de los remordimientos que lo ahogaban cada día más. Su destino fatal, en definitiva. Contigo…
El pintor suspira de nuevo. Nada que hacer. Es imposible dar tres pinceladas seguidas. Su estudio parece un salón por donde cualquiera pasa, mira, se queda, se marcha, habla, llama, murmura. La luz de tres ventanas divide el espacio, pero al pintor casi no le da tiempo a pensar en compartimentarlo a su gusto. Su prioridad es que no haya…
La cita era a las diez en punto, y se había especificado puntualidad extrema, británica. Como siempre, excepto Fernando, el anfitrión, cada uno llegó cuando le vino en gana, acorde a su carácter. Ello no dulcificó su ya adusta expresión. Cuando Ricardo, el último en llegar, se hubo sentado, Fernando tomó la palabra, serio. —Estoy harto de vosotros. Más que…
Al igual que a Woody Allen le entraban ganas de invadir Polonia, cuando escucha algo de Wagner, yo, cuando veo alguna imagen de un dinosaurio a través de cualquier medio, me acuerdo de Tito Monterroso y de su famoso microrrelato, objeto de tanto análisis y tanta chufla; y de tanta imitación, también. Hoy mismo, mientras editaba esta foto, me ha…