—Seamos serios, si no escribes nada, no eres escritor. —Claro, pero… —No sirve quererlo, no sirve tenerlo pensado, no sirve irlo diciendo: si no escribes nada, no eres escritor, convéncete. Y aun escribiendo, habría mucho que hablar. —¿Cómo? —Pues que no basta con escribir. Puedes crear una redacción como la que te mandaban en el colegio. Pero eso no te…